Lazos

Cuando eres una buena persona se supone que deben pasarte cosas buenas, bueno es como soñamos que debe ser, pero en realidad no es así, las cosas buenas pasan a todas las personas no importando lo que hagas o como te comportes, simplemente pasan y muchas veces podemos preguntarnos, como porque es que siendo tan buenos no nos llegan las cosas como las queremos?, mientras a las malas personas la vida las recompensa de sobremanera.

Creo que es importante un análisis de este tipo de preguntas, por muchas razones, así que les voy a exponer las cosas que en la compañía de nadie más que mis abuelos he descubierto.
Primero que nada, las personas no somos buenas ni malas, somos simplemente seres humanos y contamos con una dualidad que nos permite realizar acciones “buenas” y por supuesto también “malas” pero que a nuestro juicio realicemos mas acciones buenas no quiere decir que el destino, la vida o como le llamas a esta energía, tenga la obligación de verte y decir ok, niño bueno, premio!!!, pues no, la vida no es así y creo que todos nos hemos dado cuenta de ello.
El siguiente punto es, la envidia que a muchos nos da, bueno no sé si a muchos, pero a mí me da jajaja, es cuando dices o sea hello!, yo ayudando a la gente y siendo “buena persona” y nada se me da bien, mientras que a otros que se ven súper culeros, y les va de maravilla…
Este tipo de afirmaciones son envidia, digas lo que digas eso es y te da por qué a tu parecer las cosas no te van bien o bueno, para no andar de mitotero, cuando las cosas no me van bien jajaja.
Y bueno es una parte por lo menos de mi, que dice no es justo!
Pero pensando las cosas así como muy reflexivamente (como debería de ser siempre) me doy cuenta de que aunque económicamente no esté de lujo y que en el amor este del asco, la vida me ha dado muchas bendiciones muy padre, como mi maravillosa familia, los lazos que tengo con esta sobrepasan la vida misma y yo si doy gracias y muchas por haber tenido la oportunidad de conocer a todos y cada una de las personas que conforma mi familia.
Mis amigos, para mí son una parte sumamente importante en mi vida y aunque se puede decir que no tengo cientos de amigos, si tengo muchos y de los buenos, de esos que están conmigo en las buenas y en las malas y simplemente son mis amigos, por que decidimos serlo y pase lo que pase, seguiré entregándome a ellos como lo hago siempre, aunque a muchos ya nos los puedo ver con la frecuencia que quisiera, se que están ahí y cuento con la suerte de tenerlos a una llamada de distancia.
En el amor, creo que si estoy del asco, me cuesta abrirme en el aspecto afectivo de pareja, es más me cuesta hasta saludar a las personas que me gustan, ya no digamos zorrearles, tan solo verlos es para mí caótico, pero a pesar de estas limitantes que yo mismo me he creado (por qué? No tengo idea, pero están ahí) he contado con la fortuna de vivir cosas sumamente maravillosas con algunas personas y para mi esos lazos que he creado, son de los mejores y las experiencias que viví son inolvidables, si algunas son amargas, pero no todas fueron malas y creo que el peso de los dulce que viví con ellos es mucho mas grande.

Por estos sencillos hechos, creo que aunque no tengo lo que quiero cuando lo quiero, soy afortunado en aspectos a los que la mayoría del tiempo no les pongo atención y creo que es así porque ya los tengo y al no tener que hacer un verdadero esfuerzo no les doy el valor que tienen, pero lo tienen su valor es más pesado que la vida misma, pues esos lazos, los que forme con todos son para mí fabulosos y de los que no me arrepiento de tener.

Y yo te pregunto si estás leyendo esto: tienes lazos de eso que te cambian la vida y que planeas no romper, no importa lo que pase entre tú y ellos?