miércoles, 11 de marzo de 2009

¿Ilusión o confusión?


Toda la vida he sido una persona a la que le gusta imaginar, creo que esta característica me ayuda a ser tan especial, tan creativo y tan diferente, pues aunque todos tenemos la capacidad de imaginar, no todos lo hacemos de la misma forma.

La imaginación para mí es un tema cotidiano, de lunes a viernes, al ritmo de la música de mi ipod, me imagino diversas cosas de camino a la uni, para no estar en el pesado mundo de los peseros, pero que pasa cuando ese mundo de imaginación absorbe tanto tus pensamientos?

Me he puesto a analizar eso, por el simple hecho de las ilusiones a base de imaginación que en este momento de mi vida inundan mi camino, o sea las tonterías que imagino, si el será que hablaron, como hablaron, de que chingados hablaron o el donde es la fiesta, que esta pasando, no sé, son tantas las preguntas que mi cabeza se hace y tantas las películas que mi mente crea para responderlas que llega el punto en el que simplemente me harto de no saberlo a ciencia cierta y solo estar imaginando el que será.

Y peor aún son las ilusiones que mi imaginación implanta en mi corazón como un clavo de concreto estancado en la pared menos apropiada, o sea ni es el momento de estar en esas tonterías, ni es correcto que pierda los pies de la tierra!, pero no sé como dejar de hacerlo, pues aunque sé que no es el momento por las múltiples tareas que tengo que hacer, no tengo la mínima idea de si es verdad que no es el momento, o sea quien dice cuando es el momento y cuando no?, será que simplemente no tengo el valor como para afrontar las cosas de manera directa y me refugio en el “no es el momento”, como si algún momento realmente fuera el adecuado, para hacer cualquier cosa.

Haaaa! Que bobo soy, me ando ahogando en un vaso de agua y lo peor es que al parecer no quiero nadar, creo que me gusta sufrir, o sea me gusta ponerme serio y enojarme porque al parecer en algún retorcido momento de mi viaje, decidí que las cosas que doy requieren una respuesta como yo la quiero y obviamente no es así, o sea la neta se que hoy la cague y puse de malas a algunas personas y solo porque mi capricho no se cumplió… la verdad no sé ni lo que esperaba, mi mente se aclaro pasados unos 20 min. De lo sucedido, pero aun así, la confusión me invade!

¿Será que le pasa a todos?, ¿Sera que soy bipolar? O ¿simplemente soy un berrinchudo tonto que no sabe ni lo que quiere?

¿Qué se hace en estos casos?, dejamos que la vida no guie y que nuestros impulsos sean los que respondan o tengo que pensar, analizar y mediar la manera en la que me comporto con tooodos?, pero viéndolo objetivamente cuantos realmente hacen eso y si lo hacen, de verdad están libres de impulsos, de rabietas, de bajones o de alegrías inexplicables?

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